Guía de cuidados para tu gato cachorro

Lleva a tu cachorro a su primer control con el veterinario dentro de la primera semana que lo recibes para que lo examine, evalúe su estado de salud y te indique los primeros manejos.

De acuerdo a su tamaño, el veterinario te indicará un alimento apropiado y la cantidad que debes darle. Los primeros meses de vida, los gatos requieren una alta concentración de nutrientes y de proteínas ya que es de estas últimas de donde obtiene también la energía.

Los gatos deben recibir en forma anual durante toda su vida tres vacunas. Lleva registro de ellas e informa al veterinario.

1. Vacuna triple felina: se administran dos dosis iniciales, una a los 2 meses y otra a los 3 meses. Protege contra tres enfermedades virales rinotraqueitis, calicivirus y panleucopenia felina, todas muy contagiosas con síntomas respiratorios y gastroentéricos. Esta vacuna debe ser administrada nuevamente una vez al año durante toda la vida de tu gato.
2. Vacuna contra la leucemia felina: protege contra el virus de la leucemia que puede provocar diversas alteraciones en los gatitos como tumores, inmunodeficiencia, anemia, infertilidad y aborto entre otros. Se administra en dos dosis iniciales al mes 4 y 5 de vida, previo test rápido. Esta enfermedad puede contagiarse mediante la saliva de gatos infectados, por lo que no debes exponer a tu gatito a otros gatos sin haber recibido sus vacunas. Debe recibir una nueva dosis de esta vacuna una vez al año durante toda su vida.
3. Vacuna antirrábica: en Chile es obligatoria y de carácter legal por lo que deberás guardar el certificado que te entregue el veterinario. La rabia es una enfermedad neurológica mortal transmitida principalmente por los murciélagos. Se administra al mes 6 de vida y se debe aplicar una dosis una vez al año durante toda la vida de tu gato.

Estas enfermedades pueden ser mortales si no son tratadas en forma oportuna. Si observas que tu gatito está decaído, deja de comer, deja de tomar agua, presenta vómitos o diarrea, secreción nasal y/o ocular, tos o cualquier otro signo que te parezca extraño debes llevarlo inmediatamente al veterinario.

No es común que los gatos se bañen, pero puedes hacerlo con un shampoo en seco especialmente formulado para gatitos. Ya sea que tenga el pelo largo o corto, deberás cepillar su pelaje al menos una vez al día. Los gatos están constantemente acicalando y lamiendo su pelaje, al cepillarlo evitarás que trague pelo en exceso y se formen bolas de pelo en su estómago.

Además de cuidar su pelaje, los gatos necesitan gastar periódicamente sus uñas, para esto enséñale a usar un rascador especialmente diseñado para gatos, de esta forma evitarás que dañe tus muebles.

Los gatos aprenden rápidamente, en esta etapa es muy importante que le enseñes también  a usar la caja de arena para orinar y defecar. Procura ponerla en un lugar lejos de su plato de comida y lugar de descanso.